24 febrero, 2009

El paso lento


























Voy a paso lento sobre el invierno de mis ojos
Recorro minucioso cada sepulcro  
Cada presencia y cada ausencia
Observándolo todo con ojos de afuerino

Plazas, rostros, pasos, susurros volatiles
Nubes como animales, libros arrugados
Hogares de 15 minutos, piernas flaqueantes
Lamentos oxidados, sudor compartido, manchas secas
Pétalos rotos en hojas amarillas
Botellas vacías, miradas cansadas, risas 
Auroras tiritantes, sabanas arrugadas 
(Un puñal se repite se repite)

Una singular paz flota sobre estos objetos
Solo que todos se han y me han dejado solo y vacio
Tratando de ser de nuevo

¡Pero los antifaces lo destruyeron todo!
Los terremotos hundieron mi contexto
Y las nuevas tierras son demasiados inhóspitas para llamarlas hogar

Las ruinas de mi pecho
se desmoronan aun
Las bóvedas donde guardaba mis manías
Se ca-en
Roca a roca
Y nadie entenderá jamás a que me refiero
Porque mi equivalente es un símbolo
Que al acercarme vuela lejos de mí
Y cuando él se acerca, soy yo el que huyo riendo excusas

Por eso ya no se transforma en mí
Ni me muestra ningún camino a seguir

Pero bueno, así es mejor
Yo digiero todo y continúo