Cientos de miles de pies
Retumbando al unísono sobre el pavimento gris de la ciudad
Golpeando al ritmo
endiablado
Del corazón hinchado de
la civilización de los precarios
Masticando e idealizando,
inocentes
Sus conceptos básicos de
primate híper complicado
La seriedad del animal erguido que
evita tocarse con otros de su especie
Si miras por la
cerradura del templo
Verás que no hay porqué correr. El silencio es rey
Cuando caigan todos los
vestidos de baile, el reinará
Y las máscaras rodarán
rojas ante nuestro mudo asombro
Las llamas con sabor a
triunfo acudirán en cabalgata furiosa hacia las bocas
Profundizando las raíces
necesarias para aprender a esquivar el dolor
Padre todopoderoso, configúrame los
huesos para poder romper con todo
No me dejes al margen de
la batalla final y permíteme acabar con esta locura
Si miras nuevamente por
la cerradura del templo
Verás que el silencio ya
es rey en la penumbra
Y reinará incólume sobre
los vestigios rotos
Las máscaras seguirán
rodando rojas y sonrientes
Frente a nuestro tardío y
mudo asombro