Pienso en los días que quedan tras de ti
Como en sonidos sordos, persistentes
Cubiertos de marcharse, disfrazados de
olvido
La melodía de tus pasos grabando mapas en mi piel
La melodía de tus pasos grabando mapas en mi piel
Mientras compongo mi canción
Soñada y alimentada en confusión
Experimento, sin comprender como, perfectos y tímidos acordes incorrectos
Afino las cuerdas de mi sangre corriendo enajenado hacia el presente
Un día
Soné desde la nada un sonido nuevo y único
Creado solo para mi
Lo oí incredulo y decidí hacerme al viento
Tomé mi templanza y emprendí rumbo al sonido
Los amigos se despiden con pañuelos al
pasar
Los amigos se lamentan, no me pudieron
alcanzar
Muchedumbres de fantasmas deambulan
peregrinos
Apuntan con dedos secos los recovecos del
camino
Pretenden el regreso a través de mis secretos
Yo los beso uno a uno, liberando sus
silencios
El murmullo de sus siglos angustiantes
Marcha lento y triste tras de mí
El ritmo de mi lagrima anhelante
Guía mis pasos con son danzante
Avanzo
A cada zancada el camino se hace más
inestable
Tambalo
Pienso que cada desvío era el correcto
No encuentras nada a que aferrarme, nada
que sostenga
Olvido porque estoy allí,
quien soy
Pierdo la comprensión del entorno
Lo que parecía firme, es ahora un pantano
sobre pantano
Los fantasmas del camino se alejan, no me ven
Comprendo que cada desvíos eran el verdadero
Suena de fondo el ritmo sincopado del
cosmos observándote con devoción
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